Cuando un arquitecto quiere levantar una casa, lo primero que hace es un plano. Cuando quieres montar un negocio, lo primero que haces es un plan de negocio. Cuando quieres hacer un viaje a otro país, te planificas. Todo gran proyecto se inicia con un plan.
¿Y nuestras vidas no son, acaso, un gran proyecto? Creo firmemente que cada uno de nosotros somos amos de nuestro destino, y eso significa que también hemos planificado nuestras vidas.
En este artículo vas a aprender
Mensajes concretos y directos que resuenan dentro de ti...no puedes huir porque te quedas atrapada entre tanta verdad, no te queda otra que coger las riendas de tu vida. Gracias por clarificar mi camino!
¿Y nuestras vidas no son, acaso, un gran proyecto? Creo firmemente que cada uno de nosotros somos amos de nuestro destino, y eso significa que también hemos planificado nuestras vidas.
Sí, ya sé que has levantado las cejas. No me refiero a nosotros como personalidad (ego) sino como seres espirituales (almas) que somos. Supongo que estarás de acuerdo que no somos solo el cuerpo físico, ni nuestras emociones ni nuestros pensamientos. Somo la Consciencia (o Alma) que puede observar el cuerpo, las emociones y la mente.
Cuerpo, emociones y mente configuran nuestra personalidad (ego) y son el vehículo que usamos para vivir en la dimensión física de la realidad. Pero nosotros somos el conductor del vehículo (el Alma o el Ser) que usa ese cuerpo, esa mente y esas emociones para tener una experiencia humana. El Alma no nace ni muere, solo cambia de vehículo cuando la misión se ha cumplido.
¿Cuál es nuestra misión como SER HUMANO?
Nuestra Misión es doble:
- Por un lado, queremos experimentar lo que significa precisamente Ser Humano (olvidando que somos un Alma), es decir, sumergirnos en un “juego” (llamado “realidad tridimensional”) como un hombre/mujer que vive en la dualidad de la mente (que divide, por ejemplo, el “yo” del “tu”, o el “antes” del “después”, o el “bien” del “mal”).
- Por otro lado, nuestra Misión es recordar que somos Amor. Digamos que el “juego” va de olvidar quién eres para recordarlo y así poderlo celebrar (igual que celebras mucho más un triunfo cuando has sufrido derrotas, o sabes apreciar la salud cuando has estado enfermo). Dicho de otra manera, nuestra Misión es reconocer la Unidad en todo (pues todo está hecho de la misma esencia que es Amor).
Para poder lograr recordar completamente que somos Amor (y que todo es Amor), debemos madurar (a lo largo de muchas vidas o reencarnaciones) como Ser Humano y para ello debemos dominar 22 tipo de experiencias (o energías).
Las 22 experiencias para la realización de nuestro Propósito.
Como he dicho, llegar a recordar quién eres en esencia (un Alma que es Amor y que todo está hecho de lo mismo), requiere de mucha madurez espiritual (requiere de muchas vidas aprendiendo a conocerte). En ese proceso de autodescubrimiento total, hay 22 etapas o destinos que el Alma necesita dominar para evolucionar (o madurar). En esta vida has venido a experimentar una de esas 22 energías (o destinos). Podría hablar un artículo entero de cada destino, pero los he intentado sintetizar con 1 palabra:
1) La estabilidad interna
2) La sabiduría
3) La expresión de ti mismo
4) La generosidad
5) La expresión de tu Intuición
6) La capacidad de manifestar tus ideas
7) Ser auténtico
8) Ser empático
9) Conectar con tu poder para servir a los demás
10) Ser inventivo
11) Saber discernir la verdad y soltar el pasado
12) Aprender y expandir lo que aprendes
13) Tener compasión
14) Aceptarte profundamente con tus defectos
15) Encontrar la ecuanimidad dentro de ti
16) Saber liderar
17) Tener confianza en ti
18) Saber tomar decisiones difíciles
19) Facilitar que los demás crezcan
20) Explorar vías nuevas
21) Purificar tu ego
22) Liberarte del sufrimiento
Como ves, estos son los deseos de nuestras Almas, y no tiene nada que ver con los deseos de nuestros egos (que quiere un coche, una casa, un trabajo bien remunerado, viajar, etc.).
¿Cómo saber cuál de los 22 destinos es el tuyo en esta vida?
La forma más directa es preguntarle a tu interior. La meditación y la conexión con la voz de tu Alma (llamada intuición) te pueden servir. Otra forma es dejar que un profesional te ayude a conocerte. Mediante un complejo cálculo matemático basado en la vibración cabalística de tu nombre y apellidos completo, podemos determinar el PLAN de nuestra ALMA. Sí, has oído bien, nuestra Misión o Propósito de vida (así como tus talentos innatos y tu karma o aprendizajes pendientes), los llevamos escritos en nuestro nombre y apellidos y fecha de nacimiento. Sólo hace falta que sepamos descodificarlo. Conocer nuestro Plan nos ayuda a tener claridad, estar enfocados, vivir con sentido y tener más Éxito.
Este es el ejemplo del PLAN DE VIDA de Steve Jobs.
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