El Coaching motivacional y el Éxito de tu empresa

El anterior testimonio, de Yago, refleja bien el cambio que puedes esperar en el coaching. El cambio se da primero en ti, no en los demás ni en tus circunstancias. El cambio que debes buscar primero está en tu actitud, en tu manera de pensar, de sentir y actuar. 

¿Qué es un Coach motivacional?

Un coach motivacional es un entrenador que ayuda a las personas (normalmente en el ámbito laboral) a centrarse en lo positivo y a encontrar su motivación para rendir al máximo. Un coach motivacional puede ayudarte a encontrar aquello que te ilusiona y motiva, a centrarte en tus objetivos (y no dispersarte) y a trabajar para la excelencia. 

El coach profesional alinea a la persona del equipo con los objetivos de su departamento, y luego le ayuda a tomar decisiones que le ayudarán a crecer dentro de la empresa. El coach le incentiva a lograr las metas propuestas y sobre todo, a sentir que su aportación tiene sentido. Cada miembro de la empresa es necesario y tiene su mérito y el reconocimiento potencia aún más el rendimiento. Otra función importante del coach es potenciar el uso de las habilidades naturales (o talentos) de cada persona, así como evalúa la dinámica de trabajo en equipo. Por todos estos motivos, el coaching motivacional se ha convertido en una necesidad para competir y expandir los equipos de trabajo. 

¿Cómo de importante es la motivación laboral?

La motivación laboral es como la gasolina para un coche. Es importante para el equipo porque les ayuda a sentirse con ganas de trabajar y les ayuda a cumplir sus objetivos profesionales y empresariales. Sin motivación no hay compromiso ni entrega. Cuando uno trabajo por amor (y no por obligación), uno da más de lo que se le pide y hace uso de su creatividad. 

Un coach motivacional puede ayudar a desarrollar y hacer crecer a los empleados ayudándoles a encontrar su propia motivación personal para dar lo mejor de ellos mismos. La motivación individual también es contagiosa y fomenta a los miembros del equipo a sentirse más conectados con su trabajo y a aumentar su fidelidad y satisfacción en lo laboral. Lo que más retiene a los buenos empleados es el clima laboral y el entorno de trabajo. Un empleado motivado es más productivo, leal y prospera más en su carrera profesional. 

¿Qué motiva al equipo?

Los trabajadores están motivados por muchas razones diferentes. Algunos pueden estar motivados por el desarrollo laboral, mientras que otros pueden estar motivados por las necesidades personales (como puede ser el salario, la responsabilidad o el cargo). Lo que más motiva (si el salario cubre tus necesidades), es la sensación de aprender y crecer como persona, además de la capacidad de autonomía o poder para tomar decisiones. La confianza es básica para crear un clima donde las personas sean auténticas y estén dispuestas a sacrificarse para los demás y para la empresa. También motivan los resultados, es decir, ver el los frutos de tu esfuerzo. En este sentido, los bonus sorpresa o las vacaciones extras son aspectos positivos que puede aportar acicate al trabajo.

Beneficios del coaching motivacional

El coaching motivacional puede ayudar a las personas y a los equipos a desarrollarse profesionalmente, a alcanzar sus objetivos y ser felices. El coaching motivacional anima a los trabajadores a alinear sus necesidades personales y profesionales con los objetivos de su organización. El coach actúa como un engranaje para las ventas, la disciplina, el compañerismo y el bueno humor. Al final no solo trabajamos para ganar dinero u obtener resultados, sino también para superarse, desarrollar habilidades y divertirse. Un equipo más incentivado contribuye a mejorar el clima laboral, y eso hace que la empresa tenga más capacidad de atracción de nuevo talento.

El rol del Coach motivacional en el manejo de las emociones

El papel del coach motivacional consiste en desarrollar la motivación de los individuos y ayudarles a enfrentarse a los obstáculos para alcanzar sus objetivos. El coach necesita dominar la gestión emocional, pues es clave en la desmotivación. Las relaciones interpersonales son siempre generadoras de estrés laboral, de mal entendidos y conflictos. La comunicación empática y una buena gestión de las emociones es la solución a muchos de los problemas de la empresa. Las relaciones entre socios, o entre jefe y empleado o entre compañeros necesitan de una buena inteligencia emocional. 

Para poder gestionar bien un equipo, necesitas comprender las necesidades de cada uno de sus miembros. El coach emocional entiende de psicología y cómo funciona el cuerpo emocional y mental del cliente. Sabe, por ejemplo, que la pérdida de identidad (o de propósito) es una de las mayores fuentes de sufrimiento. Para ayudar al cliente a conectar con su identidad más profunda (más allá de su cargo profesional), puede ayudar hacer un análisis de su Plan de Vida. Otro aspecto fundamental en la salud de las emociones es la autoestima y autoconfianza que tenga la persona. La mayor parte de los conflictos tienen su origen en una baja autoestima y el coach puede enseñar al trabajador a superar sus propios conflictos internos.

Aspectos organizacionales que ayudan a la motivación

Entre los aspectos organizativos que contribuyen a la motivación en el trabajo se encuentran la forma en que se recluta al personal (las expectativas son importantes), las oportunidades de formación y desarrollo y la existencia de un clima laboral positivo. Los incentivos también pueden ayudar a ilusionar a los trabajadores. Una plantilla animada es esencial para el éxito de una empresa. Si la empresa tiene la figura del "coach motivacional" dentro de la plantilla, tiene más posibilidades de favorecer el rendimiento y el sentido de pertenencia. Hoy motiva mucho la flexibilidad horaria y la posibilidad de poder teletrabajar. Las personas valoran la proximidad de los jefes y la empatía de la empresa al tener en cuenta las necesidades personales y familiares de su equipo. Un equipo feliz genera mayor retorno a la empresa que desconfiar en él y tratar de presionarlo. 

La motivación personal empieza con el alineamiento del líder de la organización con su propio propósito de vida. Si el líder está alineado con lo que su corazón anhela, será mucho más feliz e irradiará esa energía al resto de los directivos, causando un efecto dominó en toda la plantilla. 

El líder necesita tener una buena capacidad de adaptación a las necesidades cambiantes del equipo. A medida que las personas crecen con la empresa, la organización debe procurar adaptarse a sus necesidades. Así por ejemplo, un ascenso está bien al principio, pero una vez la persona ha ascendido y progresado, lo que más le motivará no es otro ascenso sino, por ejemplo, poder tener un plan de formación que incluya saber motivar a su equipo.