Coaching Emocional y cómo gestionar las emociones

Qué son las emociones

Como la misma palabra lo dice (e-moción) una emoción es pura energía en movimiento. Sin embargo, para entendernos, llamamos a emociones a todos aquellos estados negativos como “agitado, ansioso, estresado, incómodo, preocupado, bloqueado, inseguro, confuso, arrepentido, celoso, furioso, indignado, aburrido, distante, melancólico, cansado, perezoso…”

Cuando la energia se siente positiva en nuestro cuerpo, le llamamos sentimiento. Por ejemplo: “animado, ilusionado, sorprendido, curioso, inspirado, cariñoso, generoso, contento, agradecido, centrado, lúcido, fresco, confiado, seguro, tranquilo…”

Qué hace que una emoción sea positiva (sentimiento) o negativa?

La satisfacción de una necesidad subyacente. Explico: toda emoción negativa indica que hay una necesidad nuestra no cubierta.

Coaching emocional y las necesidades

Cuando no tenemos una necesidad básica cubierta, nos sentimos mal. No se trata de “gestionar las emociones” sinó de saber que son indicadores de algo más profundo que hay que atender (las necesidades). Las emociones son pues la brújula para orientar al ser humano de cuán bien se está cuidando a si mismo. Cuando el sentimiento que tenemos es agradable o placentero, entonces significa que vamos por el buen camino. Hacer caso pues de lo que necesitamos es usar la inteligencia emocional.

Ejemplos de necesidades: autoestima, integridad, honestidad, pertenencia, respeto, paz, confianza, orden, afecto, comunicación, colaboración, expresión, intimidad, sinceridad, risa, humor, autonomía, aceptación, reconocimiento, claridad, transcendencia, aprendizaje, crecimiento, libertad, amor…

Seguro que recuerdas cómo Maslow categorizó las necesidades básicas:

La relación entre las emociones (negativas) y una baja autoestima

Técnicas para liberarte de las emociones tóxicas

Las emociones se vuelven tóxicas cuando no se aceptan. Cuando se viven y se rechazan o se reprimen, entonces se vuelven nocivas contra nosotros.

Toda técnica que quiera tener éxito en la liberación o transformación de las emociones tóxicas debe tener un enfoque de aceptación total de esa emoción. El coaching emocional, para mi, consiste en ayudar al cliente a sentir sus emociones (primer paso) para luego poder aceptarlas (segundo paso). Y en esa profunda aceptación (sin juzgarlas) es cuando el cliente experimenta la transformación.

Para activar y poder sentir las emociones (para poderlas aceptar) ayuda mucho la técnica llamada “Vivation” (abajo explico algo más). También ayuda la expresión corporal (hacer teatro, risoterapia, danza), y escribir tus pensamientos en un diario.

Resumiendo: para liberar las emociones solo sirve sentir lo que sientes y al mismo tiempo con aceptación, amor o gozo. La energía de la aceptación (o del amor y gozo) tienen el poder de transformar cualquier emoción (energía) de más baja densidad (como la tristeza, la rabia, el miedo…).